El verano se acabó y debemos alistarnos para el regreso a clases. Tanto los padres como los hijos deben prepararse, comprando los útiles, organizando los materiales y preparando los uniformes. De igual forma, debemos preparar mentalmente a nuestros niños y conversarles sobre esta nueva etapa y establecer los nuevos objetivos y metas a alcanzar.
Este proceso no es fácil ni para las maestras, ni para las mamás ni mucho menos para los hijos así que, es muy importante establecer, qué queremos alcanzar en este nuevo año escolar.
A mí personalmente me encanta el regreso a clases ya que, es una nueva puerta que se abre, con un nuevo grupo, con nuevos objetivos, nuevas estrategias y sobre todo buscar disfrutar al máximo esta etapa, logrando llevar al grupo a alcanzar todos los objetivos propuestos y, si podemos lograr más, mejor sin olvidar que, este proceso debe ser agradable, feliz y que si se disfruta al máximo, lograremos conseguir todo lo bueno de lo que es “educar”.
Para lograr que este proceso sea un éxito total, te voy a dar 9 consejos para ayudar a nuestros hijos al regreso a clases.
.
El Regreso a Clases
1. Re-establecer rutinas
Utiliza la última semana de vacaciones y la primera de clases, para establecer rutinas claras; practicando levantarse temprano para alistarse e ir al colegio.
Has que tu hijo(a) también practique a vestirse y a comer solo. Esto le permitirá irse adaptando progresivamente a la rutina escolar.
Trata de tener mucha paciencia durante las mañanas, para hacer alegre el inicio del día. Puedes escoger una canción y una forma especial de levantar a tus hijos.
Incentívalos a que sean ordenados y que dejen, la noche anterior, todo listo y preparado para agilizar este proceso. Los niños pueden ya tener los útiles guardado y organizados, el uniforme completo y guindado junto con los zapatos.
Romper un poco con los hábitos del verano y las vacaciones no suele ser fácil y es un proceso que toma alrededor de dos a tres semanas si el niño ya ha asistido al colegio anteriormente. Si es primera vez que va al colegio, a la escuela o al preescolar, es un proceso que puede tomar más tiempo. Acuérdate que no todos los niños son iguales y el proceso de adaptación para algunos puede ser muy difícil, sin embargo hablar con tu hijo(a) ayudará mucho. Explícale porqué es importante que asista al colegio, que va aprender y lo mucho que va a disfrutar con sus nuevos compañeros.
Si observas que ha pasado más de uno o dos meses y tu hijo(a) no ha logrado adaptarse, puedes pedir una consulta con la psicóloga del colegio, para que te de estrategias y herramientas necesarias para abordar el problema.
Además es importante que los padres ponga de su parte para que sus hijos se adapten.
Por ejemplo si llevas a tu hijo caminando y notas que al dejarlo llora, hace berrinches y pataletas, lo mejor será que los dejes en carro.
De igual manera no demuestres tristeza frente a tu hijo al dejarlo en el colegio ni llores frente a él, muestra alegría y diversión, aunque por dentro estés destrozada por ver a tu hijo(a) llorar.
Ya por último, no amenaces ni sobornes a tu hijo(a), esto no ayudará sino empeorará las cosas, recuerda que, las maestras comprendemos perfectamente lo que es el proceso de adaptación y estaremos ahí, para ayudarlos.
2. Enseña a tu hijo a ser independiente
El inicio de clases también significa madurar, ser responsable e independiente. Estas tres cosas no son fáciles, pero se irán dando progresivamente. Sin embargo, tu como madre o padre puedes hacer que tu hijo sea lo más independiente posible de acuerdo a su edad.
Permítele a tu hijo, vestirse, bañarse, ir al baño y a comer, por sí sólo. Incluso permite que te ayude a armar su lonchera, abrirla y cerrarla, siempre bajo tu supervisión. Esto ayudará a que tu hijo se desenvuelva en la escuela.
Recuerda que un salón de clases está conformado por alrededor de 12 o más niños, con un mínimo de una o dos maestras (esto dependerá de la cantidad de niños) y durante la rutina ocurren accidentes con pintura, accidentes en el baño, derrame de jugo, de agua, vómito o incluso molestias estomacales o fiebre, lo cual la maestra además de estar atendiendo a todos los niños por igual, debe estar resolviendo estos accidentes que, prácticamente pasan a diario.
Mientras más independiente sea tu hijo(a), más rápido podrá avanzar y alcanzar sus metas, ya que no tiene que esperar por la estimulación del adulto para que logre las cosas.
3. Crea un menú sencillo y nutritivo especial para la lonchera
El tema de la alimentación suele ser un poco complicado para los padres, ya que hoy en día, los niños suelen ser intolerantes a la lactosa, al gluten o incluso no suelen comer bien. Sin embargo, esto no quiere decir que no puedas establecer un menú sencillo, nutritivo y apetitoso.
Evita incluir en la lonchera alimentos que tu hijo no come en casa. Esto es muy común ya que los padres piensan que, al mandar alimentos no deseados por lo niños en casa, lograran comerlos en el colegio porque su maestra lo va obligar, lo cual no es cierto.
Nosotras las maestras nos preocupamos mucho por la buena alimentación de nuestros alumnos, ya que de lo contrario, no tendrán un buen desempeño porque no tendrán las energías ni los nutrientes necesario para desarrollar su intelecto.
Otra de las características notorias de los niños inapetentes o de mal comer durante la rutina escolar, es ser soñolientos, es decir, los niños se quedan dormidos durante la rutina o simplemente no ponen atención durante las actividades, porque no tienen energías ni la motivación para hacerlo.
La mayoría de las maestras tratamos que, nuestro niños o alumnos coman por lo menos la mitad de su merienda o desayuno, pero no es recomendable que los padres incluyan alimentos no deseados por los niños, porque comienzan a asociar la merienda como un proceso desagradable, lo cual puede hacer difícil la adaptación. Estos casos se dan particularmente cuando el niño va al colegio por primera vez.
Puesdes utilizar moldes de galletas para hacer divertida la presentación de las comidas, cortando y creando figuras divertidas y especiales con los alimentos por ejemplo: los sándwiches, las panqueas, las chapas o arepitas o cualquier alimento que le prepares.
Incluye las frutas como postre,para evitar los dulces, ya que los niños no necesitan del azúcar. La alimentación infantil, es muy importante para el intelecto y el rendimiento escolar, así que establece una merienda saludable, sana y fácil, dónde el niño por sí solo, pueda comerse todo su desayunado, sin que sea un proceso desagradable para él.
4. Establece un horario y un lugar para estudiar
El hábito de estudio se adquiere, lo cual es de suma importancia que los padres establezcan un lugar que sea cómodo, con buena luz y sin ningún tipo de distracción para hacer las tareas y estudiar.
De igual manera establecer una hora específica para hacer las tareas o estudiar es de suma importancia, donde se cumpla todos los días. Esto le permitirá a los niños a organizarse en el tiempo, logrando adquirir el hábito, que le servirá para cuando entre en la universidad e incluso en el trabajo.
Recuerda que es de suma importancia la postura al trabajar de tu hijo(a). Hoy en día venden cualquier tipo de muebles súper modernos, cómodos y multifacéticos, lo cual permitirá que este lugar sea armónico. De igual forma chequea y evalúa si tu hijo(a) al sentarse en la silla, logra apoyar los pies en el suelo y que, la mesa no sea muy alta para él o ella ya que, para escribir es necesario poder apoyar el brazo correctamente en la mesa.
5. Establece actividades para la tarde (actividades extracurriculares)
Mantener al niño activo es muy importante sobre todo si es una actividad que le permitirá desarrollar alguna inteligencia.
Existen un mil actividades sin embargo recomiendo no sobre cargar al niño ya que, él también necesita momentos de descanso.
Personalmente recomiendo actividades dónde pueda desarrollar el hemisferio derecho, es decir todo lo que es la creatividad, la intuición, lo espacial puesto que, la mayoría de los colegios o escuelas se centran mucho en el aprendizaje de la lectura, la escritura y las matemáticas, olvidando desarrollar el resto de las inteligencias.
De igual manera tomaría en cuenta clases particulares de un segundo idioma. Con esto le estaría dando a tu hijo(a) herramientas para el futuro.
6. Establece rutinas de descanso
¿Sabías que cuando los niños duermen crecen?
Pues sí, cuando los niños duermen segregan la hormona de crecimiento. Además reponen energía necesarias para iniciar alguna actividades extracurricular que requiera de la concentración y de la memoria.
Es recomendable establecer rutinas de descanso, si el colegio durante su rutina no las tiene, puesto que puede ser negativo para la salud de tu hijo.
7. Planea soluciones efectivas, en caso de que tu hijo(a) se enferme
El regreso a clases también significa bienvenida las gripes, las infecciones e incluso las fiebres.
Los padres deben saber y tomar en cuenta que podrán recibir llamadas del colegio debido a que su hijo(a) se encuentra enfermo y deben retirarlo del colegio a media mañana para que se recupere.
Este tema es también un poco complicado, ya que al enfermarse tu hijo(a) significa que perderá clases y contenido. Sin embargo, hay muchas formas en el que tu hijo se puede nivelar, ya sea con la ayuda de la maestra, de un compañero o de los padres. Esto lleva a evaluar la necesidad que tendrá tu hijo de reposar, tomando los días necesarios para mejorarse.
Enviar al niño enfermo puede ocasionar contagio de la enfermedad no solo al resto de los compañeros, sino también a las maestras.
Para estas emergencias es necesario que previamente al inicio de año escolar, puedas programar con una niñera de confianza, una abuelita o una hermana, o con un grupo de padres que pueda ayudarte durante esos momentos.
Esto te permitirá a tí como madre o padre estar “tranquilo”, cuando ocurran estos imprevistos.
8. Asistir a las orientaciones y charlas informativas
Los colegios, las escuelas o preescolares, suelen tener sesiones de orientación e información antes del inicio de cada curso, incluso de cada lapso.
Cada una de estas sesiones son de gran oportunidad para tí para que puedas conocer no solo a la maestra, sino saber todas las cosas que tu hijo(a) va a aprender, cuales estrategias y técnicas utilizará la maestra y de igual forma, conocer en sí, la calidad de educación que estará recibiendo tu hijo(a).
9. Ten una buena comunicación con las maestras
La comunicación con las maestras, será uno de los pilares fundamentales no solo para el regreso a clases sino para el resto del año escolar.
Ella es quién conocerá perfectamente a tu hijo y podrá ayudarte en cualquier dificultad, incluso podrá darte estrategas puntuales para cada situación.
10. Establece objetivos claros para este nuevo año escolar
Esta es una de las cosas más importantes ya que le permitirá a tu hijo estar claro en las metas que debe alcanzar. Con este punto no estoy queriendo decir que debas ser un dictador, sino que seas su guía, que le aclares cuales cosas debe alcanzar.
De igual forma debes expresarle y comunicarle a tu hijo que este proceso es un trabajo en equipo ya que, la educación no solo involucra al colegio, sino a los padres.
El aclararle al niño las cosas que debe hacer, lo estamos ayudar en captar de manera fácil los objetivos, ellos y solo ellos, escogerán las maneras de cómo lograrlas, pero tanto los maestros como los padres, podremos estarles recordando el enfoque y el camino. De esa manera, el niño podrá conocer el terreno por dónde caminará, incluso las dificultades por las cuales pasará.
Con cada uno de los consejos nombrados anteriormente, estarás preparada para el regreso a clases, donde aplicándolas, lograrás que este proceso y que el resto del año escolar sea todo un éxito.
No olvides que esto es un trabajo en equipo y todos los miembros deberán participar para que tu hijo(a) tenga todo el apoyo para atravesar las dificultades y lograr las metas establecidas.
¿Qué te pareció el artículo? ¡Opina!
Leave a Reply